DISTANCIAS DE VERANO

¿Por qué somos capaces de sentir que cuánto mejor es él, peor nos estamos comportando nosotros?

Me he pasado todo un verano lejísimos de mi gran amor. 

Ha sido una prueba de fuego. Y sí, me he quemado y varias veces.

El verano y la distancia ha puesto a prueba muchas cosas que aún no habíamos experimentado. Y qué cosas.

Me he dado cuenta de que he querido hacer tanto mi vida que habían momentos que no me ha importado él. Que podía desaparecer y que todo siguiera bien.

Además, siento que no me he portado nada bien con mi corazón ni con el suyo, sobretodo. He sido tan sumamente tonta y no le he prestado la atención que merecía, y menos aún la importancia que merece. 

A todo esto sumamos la inmensidad de miedos que tenía y algunos ni los admitía tiempo atrás. 

Y es que para variar, él ha sido quién me ha hecho abrir más los ojos toooodo este tiempo.

Y ahora te pregunto a ti, ¿Y tú qué has hecho por él?

Te recuerdo, querida, que él te ha insistido en hacer cosas que te han costado muchísimo, te ha organizado el viaje exprés del verano y te ha animado cada puñetera vez que has caído. Pero te ha levantado de verdad de la buena.

Y tú, querida, ¿Qué?

Siento que este verano no he demostrado ni un maldito 100%, mientras que tu has dado el 500%. 

Y yo me pregunto, ¿merezco tal persona?

Encima, señora del maharajá, ha parecido en varias ocasiones que ni es tu prioridad en tu vida. Que no le importas.

Y madremia, si su corazón supiera las veces que le susurro, entonces todo cambiaría. 

Cambiaría la voz,  cambiaría la forma, cambiarla el amor.

Y es que sí me importa y sí que es mi prioridad; es mi vida.

Y siento que le he fallado, que no he sido yo al 100%. Ansiedad, miedos... Todo ha salido menos lo más importante: priorización.

Me siento pequeñita, en un mundo lleno de gigantes. 

El corazón llora, llora mucho. Y duele como si de una daga en el corazón se tratara, pues la traicionera he sido yo.

Como dijo un gran poeta: "tanto dolor siento en mi costado, que por doler me duele hasta el aliento"

Y así es. Pero querida mía, debes saber que cuando aún no todo está perdido, debes cambiar la actitud. Debes cambiar la perspectiva. Debes cambiar el enfoque. 

Porque llegaron para darte todo, y lo has tirado a una basura bien solitaria en el fondo del mar.

Y no es justo. De verdad que no lo es.

Querida, aprecia mucho más lo que tienes, porque es el mayor tesoro que jamás encontrarás. Y de ti depende querer cogerlo con todas tus fuerzas o dejarlo esfumarse. 

Y no es justo para ningún corazón vivo. 

Vive, vive y ama, ama con todas tus fuerzas del mundo y que NADA ni NADIE te pare. 

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